The Walking Dead 2, más muertos que nunca.

¿Se acuerdan de mi reseña de la primer temporada de The Walking Dead y lo tortuoso que fue para mí terminar de ver todos los capítulos? (Aquí se los recuerdo). Bueno pues ya ha comenzado la segunda temporada de este show de tv sobre “Zombis” (y lo de ponerlo entre comillas es porque creo que incluso a sus productores se les olvida que se trata de eso).

Bien, en general recordemos que no me gustó el final de la primera temporada. Y antes del estreno de su segunda parte me enteré de datos que no ayudaron a darme aliento:

1. Se dijo que se cambiaría a todo el equipo de escritores.

2. Renunció uno de los creadores y productores del programa de televisión.

3. Se anunció un recorte de presupuesto para la serie, lo que significa: Menos Zombis.

Y bien. Pese a toda esta tempestad, el programa regresó. Y regresó muy mal. Tengo que aceptar que el primer capítulo tenía cosas bastante positivas, por ejemplo: La secuencia en la que se esconden debajo de los automóviles (es escalofriante). Pero volvieron a la misma mecánica telenovelera de mucha plática y poca acción.

¡Es una serie de zombis y nunca da miedo! ¡¿O a ti si te asusta?

Tengo principalmente el problema de que me parece que la trama se desarrolla de manera extremadamente lenta (¿2 temporadas y el protagonista aun no sabe que su esposa lo engañó?), la acción es escasa y sus reflexiones sobre los sentimientos, la vida y la muerte están de más. Se debería de tratar acerca de sobrevivir, pero no es así.

Sin embargo, parece que el mundo ve algo que yo no veo, ya que por lo menos en América latina la temporada está resultando un gran éxito de audiencia y mis allegados no hacen otra cosa más que hablar de ella. ¿Vemos el mismo canal? ¿Vemos la misma historia?