Hace una
semana aproximadamente que ha llegado una nueva obsesión a mi vida, se trata de
la literatura digital. Tengo más de dos años escribiendo novelas electrónicas (“Erase
una vez, Adán”, “No despiertes” y “Cómo sobrevivir a un vampiro”), pero hasta
ahora no había vivido la experiencia de leer un libro en un lector digital.
Resulta que
previamente leí comentarios de gente que decía:
-No es lo
mismo, se echa de menos el olor a papel.
-Hace falta
el poder tocar la portada y sentir el espíritu del libo.
-Seguro te
afecta más la vista, como todas las pantallas.
Bueno, pues
retomando, hace una semana me llegó mi regalo de navidad (atrasado), yo creí
que mis padres habían comprado el “Kindle Fire”, pero entre errores de comunicación
y malos entendidos en la tienda, terminaron trayéndome un: Nook Color (casi la
misma cosa), y aunque al principio creí que era terrible que no fuera un
kindle, ahora me viene bastante bien.
Puedo decirles:
-No echo de
menos el papel, al contrario, me es tan fácil transportar lo que incluso estoy
leyendo en la fila del banco.
-Por la
portada ni preocupo, la tengo a todo color y resulta la misma cosa.
-Por mi
vista… bueno, no es que sea un doctor, pero no creo que la dañe. Resulta que la
pantalla al leer se vuelve tan opaca como la hoja de un libro, casi ni notas la
diferencia.
En resumen:
estoy contento, soy adicto. Ya he descargado 100 libros (el costo es aun más
accesible que el papel tradicional) y ahora no puedo parar de leer.
No estoy
seguro si le formato electrónico sustituya un día al papel, pero de qué va
bien, va bien.
2 comentarios:
Hombre, yo pensaba que tenías un Kindle.
No he tenido la oportunidad de probar el Nook, pero si dices que resulta muy útil, pues solo puedo decir que es lo importante. Con estos lectores puedes adelantar mucha lectura y por ende, leer más, hace que esos libros pesados parezcan muy livianos.
¡Saludos!
No sé cuales sean las diferencias, pero estoy encantado!
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