“Para vestir
santos” es una producción de teleserie argentina de la casa productora Polka (sí,
la misma de “mujeres asesinas”, “Locas
de amor” y “Son de Fierro”). Curiosamente
y a diferencia de las anteriores, aun no existen planes de llevar este
formato a la televisión mexicana (Lo mismo sucedió con la maravillosa “Trátame
bien”). Esta serie fue transmitida en el 2010 en Argentina y apenas he venido a
tener el tiempo de disfrutarla. Por ahora solo llevo los dos primeros capítulos
y tengo que decir que me FASCINA.
Es de verdad
maravillosa, hay que destacar un punto que creo que no se ha hecho notar en
otros artículos de esta índole. Parece (por lo menos a mi) que “Desperate
Housewives” hubiera tenido un importante impacto e influencia en la tele argentina,
y es que este programa (igual que muchos otros de esta nacionalidad) cuenta con
importantes rasgos de la esencia de lo que fue este show norteamericano (¿Por
qué los argentinos se vieron influenciados por esta serie y México estando tan
cerca de Estados unidos no? Aun no lo sé, pero ya lo averiguaré). El humor
negro, el ritmo, el formato de contar la historia y un poco de la esencia de
sus personajes recuerda mucho a la serie gringa creada por Marc Cherry. Y esto
no le resta para nada, no mal interpreten. “Para vestir santos” es una serie de
televisión que se encuentra a la altura del primer mundo, una joya en su total extensión.
Sus personajes son entrañables y adorables, ya siento que quiero a estas tres
hermanas cómo si fuesen parte de mi familia. De verdad que no pueden dejar
pasar esta maravilla. Como ya lo dije: a México no ha llegado y tampoco creo
que lo haga pronto, así que nuestra única solución para apreciarla es el
apreciado internet.
Puntos a favor de
“Para vestir santos”:
-Su maravilloso
sentido del humor.
-Sus entrañables
(y perfectamente delineados) personajes.
-El giro que
sucede al final del piloto.
-Y finalmente,
contar con una premisa fresca dentro de una televisión que parece contarnos más
de lo mismo.
Sinopsis:
Gloria (Betiana
Blum) una viuda severa y ácida, muere de forma súbita. Sus tres hijas, Susi
(Gabriela Toscano), Virgi (Griselda Siciliani) y Male (Celeste Cid), todas
solteras, comprobarán que la desaparición de esa tremenda madre no implica
liberación alguna. Como si el fracaso de sus vidas, especialmente con los
hombres, estuviera signado por algún tipo de maleficio.
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